Tecnología
Intel se encuentra en una etapa crítica de su transición tecnológica, tras reportarse problemas significativos en su proceso de fabricación 18A, clave para producir su chip Panther Lake. Informes recientes indican que las tasas de rendimiento rondan apenas el 10 %, muy por debajo del umbral mínimo del 70–80 % necesario para producción rentable.
El nodo 18A incluye innovaciones como transistores de nueva generación y un sistema mejorado de distribución eléctrica, pero su alta complejidad técnica ha dificultado su escalado industrial. Intel reconoce que la producción está en fase inicial y promete mejoras progresivas.
En paralelo, la compañía enfrenta un cambio de liderazgo y reestructuración interna: tres altos ejecutivos han anunciado su retiro mientras la nueva administración prioriza eficiencia y reducción de personal en áreas de fabricación.
Con la estrategia del CEO Lip-Bu Tan, Intel vincula el desarrollo de su siguiente generación, el nodo 14A, a la captación de grandes clientes externos. Sin esos acuerdos, la posible suspensión de su desarrollo pondría en duda el modelo de fundición propia y su capacidad de competir con TSMC.
En el mejor escenario, Intel busca alcanzar el equilibrio financiero de su negocio de fundición a más tardar en 2027, apoyado en mejoras en el nodo 18A y continuidad en su cartera de nodos maduros.
Fuente: Forbes
