La marca estadounidense Gap presentó su campaña de otoño ‘Better in Denim’, una propuesta que busca conectar con nuevas audiencias a través de un mensaje de diversidad, identidad cultural y nostalgia de los 2000.
El lanzamiento destacó al grupo femenino Katseye, conformado por mujeres de diferentes nacionalidades y estilos, quienes muestran que el denim es más que una prenda: es un símbolo de expresión, conexión y autenticidad.
Esta estrategia llega tras la controversia generada por American Eagle con su campaña “Sydney Sweeney has great jeans”, que fue criticada por reforzar estereotipos de belleza poco inclusivos. Gap, en contraste, opta por un enfoque plural que celebra la diversidad sin perder su esencia aspiracional.
La campaña también dialoga con el regreso de la estética de los 2000 —jeans de tiro bajo y la silueta Long & Lean— acompañado de la coreografía al ritmo de “Milkshake” de Kelis, un guiño generacional que ha captado la atención en redes sociales.
El giro estratégico tiene respaldo en datos: un estudio de Nielsen (2020) revela que el 66% de los consumidores globales prefieren marcas que reflejen diversidad en sus mensajes, mientras que un informe de McKinsey (2022) advierte que la inclusión mal ejecutada puede generar desconfianza.
Con la preventa de la colección fijada para el 22 de agosto, Gap mide no solo el impacto de su línea, sino también la respuesta a un relato de inclusión que busca mantenerse relevante en la conversación cultural y comercial.
