Tecnología
La fabricación de precisión está jugando un papel estratégico en la transformación económica de México. Más allá de su asociación con sectores altamente especializados, hoy representa una capacidad transversal que fortalece industrias clave como la automotriz, electrónica, metalmecánica y médica. En 2024, la producción de autopartes —dependiente de procesos de alta precisión— superó los 121 mil millones de dólares, según el INA. Esta cifra refleja no solo volumen, sino sofisticación industrial y competitividad.
El crecimiento de este segmento responde a un cambio profundo en la forma de producir. La trazabilidad industrial, el monitoreo en tiempo real y la confiabilidad de los datos se han vuelto activos estratégicos. Las empresas que los dominan no solo reducen errores y costos: acceden a cadenas de suministro globales, generan confianza con sus clientes y están mejores preparadas para futuras exigencias regulatorias.
“ La integración de trazabilidad en procesos de fabricación ya no es opcional: es indispensable para competir en sectores de alta exigencia ”, afirma Martín Quintero Rubio, director regional de ventas de ZEISS IQS. “ Medir va más allá de cumplir una norma; implica construir confianza con clientes globales, reducir riesgos y garantizar procesos sostenibles a largo plazo ”, añade.
Trazabilidad industrial: eficiencia y confianza para competir
La trazabilidad se ha convertido en un diferenciador operativo. Su implementación permite que las organizaciones no solo cumplan normativas, sino que optimicen cada etapa de producción. Plataformas inteligentes, sensores conectados y soluciones de metrología son ya parte de las plantas industriales que buscan reducir tiempos, desperdicios y riesgos.
Esta evolución ha llevado a que la fabricación sea el motor principal del país. En la primera mitad de 2024, representó el 19,5% del PIB, de acuerdo con la Secretaría de Economía. Esta cifra no solo muestra peso económico, también revela un cambio cualitativo: la industria mexicana produce con más precisión, más control y con procesos que se documentan y auditan en tiempo real.
Competitividad y posicionamiento global
La fabricación de precisión se ha posicionado a México como un hub industrial estratégico a nivel global, gracias a cuatro factores clave:
Adopción de tecnologías avanzadas: Empresas mexicanas están utilizando herramientas como corte y soldadura por láser para cumplir con exigencias internacionales en cuanto a precisión y calidad.
Formación de talento especializado: La llegada de soluciones industriales de última generación ha detonado programas de formación técnica y de desarrollo de talento, tanto en instituciones educativas como en centros de capacitación privados.
Ubicación geográfica estratégica: La cercanía con Estados Unidos no solo reduce tiempos logísticos, también facilita la integración de cadenas de suministro regionales altamente exigentes.
Cumplimiento normativo de certificaciones internacionales: El cumplimiento de certificaciones permite a las empresas mexicanas competir con estándares globales, abriendo puertas en sectores de alto valor agregado.
Este conjunto de ventajas ha fortalecido el papel de México como destino atractivo para la inversión extranjera directa. Durante 2024, la industria de autopartes captó dos mil 467 millones de dólares en IED, lo que representó un crecimiento del 21.5 % frente a 2023, según el informe de la INA
Máquina de medición por coordenadas inspeccionando una pieza metálica en laboratorio de calidad industrial.
Tendencias y perspectivas futuras
El horizonte para la fabricación de precisión en México es prometedor. El director regional de ZEISS IQS apunta que las siguientes tendencias serán claves en su evolución:
Mayor adopción tecnológica: La proyección del crecimiento sustentada en la incorporación de tecnologías de automatización , digitalización y fabricación inteligente. Esto permitirá a las empresas locales escalar sin sacrificar la calidad de sus operaciones.
Nearshoring : La relocalización de cadenas de suministro hacia México —impulsada por tensiones geopolíticas y la necesidad de reducir riesgos— está abriendo nuevas oportunidades para empresas que ofrecerán procesos de alta precisión.
Formación técnica especializada: La demanda por talento con habilidades en fabricación avanzada crecerá de forma acelerada, motivando inversiones en educación técnica, certificaciones y capacitación continua.
Manufactura inteligente: La integración de inteligencia artificial, sensores industriales y análisis de datos está configurando una nueva era en la producción, donde cada decisión operativa se basa en información precisa y en tiempo real.
Cadenas de valor más integradas: La tendencia apunta hacia una fabricación menos fragmentada y más colaborativa, en la que las empresas mexicanas podrán participar en etapas críticas del diseño, prototipado y producción.
Precisión como ventaja estratégica
México ya no es solo un país que ensambla; es un país que mide, verifica y entrega con precisión. La consolidación de la fabricación de precisión no es fruto del azar, sino del trabajo coordinado entre industria, gobierno y centros de innovación. Hoy, más que nunca, la trazabilidad industrial, la calidad y los datos confiables son los activos más valiosos de la fabricación mexicana.
El país aún enfrenta desafíos —como la profesionalización del talento y la adopción uniforme de tecnología—, pero las bases están puestas. “ México está transitando de ser un actor de volumen a convertirse en un referente de valor, con procesos que cumplen, y cada vez más, superan los estándares globales de precisión ”, concluye Quintero Rubio.
Acerca de ZEISS
ZEISS es líder internacional en el campo de la óptica y optoelectrónica. ZEISS contribuye desde hace más de 175 años al progreso tecnológico mundial de mercados como las soluciones industriales, las soluciones de investigación, la tecnología médica y la óptica de consumo, mejorando así la calidad de vida de muchas personas. ZEISS garantiza los estándares de calidad más altos en aplicaciones donde se requiere la máxima precisión, con soluciones de medición e inspección para el control de calidad, en las industrias automotriz, médica, aeroespacial, de semiconductores, entre otras.
Fuente: Infosol